Entre la atracción y el peligro del morbo.

La muerte de Heath Ledger no fue sólo el hecho más conmocionante que le tocó vivir a Hollywood en los últimos tiempos. Allí, tal como acaba de señalarlo desde Los Angeles el experimentado cronista David Germain a través de la agencia AP, se sostiene que Batman, el caballero de la noche es, fuera de toda duda, la película más importante de toda la historia del cine norteamericano, que incluye una relevante actuación póstuma.

Ni bien se conoció el trágico fallecimiento del actor australiano, el 22 de enero último, las especulaciones sobre el hecho se asociaron directamente con el compromiso actoral que Ledger pareció llevar casi al extremo en la película, al interpretar a un Guasón "punk, anárquico, adicto, fantástico, sin reglas, como si hubiera llegado a esta historia desde La naranja mecánica", según la confesión de Christian Bale, que encarna a Batman en El caballero de la noche.

Ledger llegó a hablar de los efectos nocivos que habría ocasionado ese trabajo en su salud, ya que padecía insomnio y sobrellevaba un cuadro permanente de agotamiento, que sólo podía remediar a través de pastillas. "Recuerdo haberle dicho, al verlo tan cansado, que estaba demasiado viejo para poner semejante energía en ese papel. Y me decía a mí mismo que jamás tuve esa energía a la edad de Heath", confesó hace poco Michael Caine, que vuelve a interpretar a Alfred, el mayordomo de Bruce Wayne.

Quienes siguen la evolución de Batman y los personajes que lo rodean aseguran que el enajenado Guasón de Ledger no tiene nada que ver con sus predecesores en el personaje. Basta comparar, según se observa en el trailer del film, la descuidada pintura de su rostro. Ese desaliño le otorga a primera vista un perfil tan amenazante como descontrolado, que va todavía más allá en su carácter de villano de la composición que Jack Nicholson hizo para Tim Burton en el Batman, que llegó a la pantalla grande en 1989. El otro Guasón famoso entre los fans del Hombre Murciélago es el risueño y caricaturesco dibujo que hizo César Romero en la popular serie televisiva de los años 60.

Más allá de la curiosidad de los fans, aparecía en el horizonte otro gran interrogante: ¿cómo promocionar la película y crear expectativa en relación con un estreno abierto a la curiosidad morbosa? El riesgo estaba latente en cualquier elección que pudiera adoptarse al respecto.

Lo que acaba de verse en ShoWest, la convención anual de los dueños de los cines en los Estados Unidos, donde se presentaron por primera vez anticipos de la película, es que el plan de promoción se mantuvo tal cual estaba planificado antes de la muerte de Ledger. Los ejecutivos de Warner Bros. no hicieron comentarios al respecto en la prensa norteamericana, pero el director Nolan y los protagonistas del film dijeron allí, en Las Vegas, que pensar en otra cosa hubiera sido una falta de respeto a la memoria de Ledger.

Fuente: http://www.lanacion.com.ar