jueves, noviembre 02, 2006

Heath Ledger, un héroe accidental (colaboración de Tesalia)



La traducción de esta entrevista publicada en el TIMES, pertenece a nuestra querida amiga Tesalia. Tesalia, muchas gracias por todo el trabajo que esto te ha significado y por el amor con que luego lo compartes. Un abrazo inmenso.


Heath Ledger - Un héroe accidental
KEVIN MAHER
Comenzó a actuar en la escuela, y fue rápidamente elegido por Hollywood como el clásico protagonista. Ahora, de 27 años, Heath Ledger habla sobre romper esquemas y la vida después de Brokeback.
Han pasado tres días y Heath Ledger no ha tocado una sola gota de heroína; la abstinencia, sin embargo, lo está matando. Se sienta desnudo en el fondo de una estrecha bañera, coloca su cadavérico cuerpo en una muy ajustada posición fetal mientras golpea su cabeza repetidas veces, salvajemente, con rápidos y enfadados puñetazos. Es una escena incomoda; pero es su papel como Dan, el masoquista, el protagonista toxicómano de la reciente y dulcemente lúgubre historia de amor australiana Candy (este año se exhibe en The Times London Film Festival). Aquí, Ledger realiza una interpretación perfecta. Los premios, sin duda, son inminentes.
Sin embargo, el nativo de Perth, de 27 años de edad, actor emergente de primera fila y nominado a los Premios Oscar como estrella de Brokeback Mountain no lo ve de ésa manera: "Por ahora, me siento casi como todo el que sabe cómo interpretar a un toxicómano", se encoje de hombros, "Como un adicto que realmente ha tenido una sobredosis. Tu lo ves en películas, por televisión, y en libros y revistas", frunce el entrecejo, concentrándose, como dando poca importancia al asunto "Me siento como en la escena de la abstinencia, entiendes?, todos sabemos que será doloroso".
Tengo casi siete minutos de conocerlo, pero desde ya percibo que estoy frente al verdadero Heath Ledger: cruelmente humilde, ligeramente combativo, incomodo, a veces abierto, inquieto y, sin embargo, básicamente lleno de honestas intenciones. Aquí está un actor para quien, como muchos de los mejores actores (como De Niro, o como Day Lewis), la introspección pública es lacerante. Estamos sentados en el semidesierto comedor de un lujoso hotel en Toronto. Es el intermedio de un famoso festival cinematográfico de la ciudad y las únicas personas cercanas son los famosos: Jennifer López y su esposo Marc Anthony, que se están preparando, detrás de nosotros, para una entrevista para la televisión; Penelope Cruz, que está caminando de aquí para allá, a un lado nuestro, en el vestíbulo; Brad Pitt y Matt Damon, que están a punto de ser asediados cerca de la salida adyacente.
Ledger, al contrario, tiene una actitud anti-estrella. El actor, que recientemente se comprometió a interpretar al Guasón, en la venidera continuación de Batman, además de a uno de los siete de Bob Dylan (de la cual hablaré después) en la casa de arte de Todd Haynes, en la película biográfica I’m Not There; usa unos vaqueros roídos, camiseta negra holgada y cabello largo hasta los hombros, despeinado como si se acabara de levantar. Mientras habla, se inclina hacia adelante en su asiento, toma un cuchillo del dispensador y lo utiliza para raspar el logotipo del hotel en el menú de especialidades. En el pasado, a menudo usaba lentes negros, gruesos y envolventes para las entrevistas con la prensa. Ha mantenido una relación tortuosa con los medios de comunicación, y groseramente fue mojado con una pistola de agua por un paparazzi, en el estreno de Brokeback Mountain en Sydney (como represalia por su supuesta "actitud" abusiva hacia ellos). Sin embargo, recientemente declaró que no impulsará más el proceso. Por eso, hoy usa lentes para el sol traslucidos dentro de la estancia, considerados por la prensa como amigables, que tenuemente revelan dos enigmáticas pupilas marrón oscuro que destellan intensamente en el centro de esos famosos ojos negros.
Conversamos un poco más sobre Candy. La película, una adaptación de una novela australiana de gran éxito en ventas de Luke Davies, se sumerge en las profundidades de la adicción a la heroína. Está salpicada también con momentos de dulces y amargas frivolidades y el trágico afecto entre el Dan interpretado por Ledger y su epónima amante, también heroinómana, interpretada por la recién llegada Abbie Cornish. Hablamos durante unos instantes sobre drogas. Sí, Ledger ha fumado hierba, pero nunca ha sido adicto a algo más fuerte que la nicotina. Él comenta sobre las extenuantes técnicas de ensayo. "Compramos algo de heroína y nos la inyectamos. Nah. Sólo bromeo. Perdí algo de peso y evité el sol". Le pregunto si este papel es otro más en una creciente lista de recientes actuaciones que están diseñadas para mandar al diablo la antigua imagen Hollywoodense de chico con carita bonita/galán del momento y poco talento.
Cambia, se encoge de hombros y raspa otra vez en el menú de especialidades. "No sé amigo, realmente trato de no preocuparme de la reacción ahí fuera por lo que hago. De lo contrario, eso afectaría mis elecciones. Así que, realmente no me preocupa."
Y sin embargo, hubo seguramente una preocupación, alguna vez, en torno al gran éxito del verano A Knight’s Tale, cuando había sido.... Tish-tish tum, tish-tish tum, tish-tish tum …el timbre con ritmo de Rithm & Blues del celular de Ledger interrumpe nuestra conversación. Lo toma, responde, y su cara se ilumina como la navidad. "Eh, mi nena!", dice él, radiante. Es Michelle Williams, su enamorada, coprotagonista nominada a los Premios Oscar por Brokeback Mountain y madre de su bebé de 11 meses, Matilde Rose. "Lo siento mucho," dice, mientras sale disparado de su silla. "Puedo tomar dos minutos para esto?".
Ledger conoció a Williams a los 26 años, en el set de Brokeback Mountain. Según el director Ang Lee, esto fue amor a primera vista. Hubo otras en el pasado, sí. Heather Graham de Boogie Nights fue una. Naomi Watts de King Kong otra. Así como también lo fue Lisa (la hermana de Billy) Zane. Pero esta vez, esto fue diferente: Ang Lee ha sugerido veladamente que a Ledger hasta le podría haber gustado Williams antes de que en realidad la conociera. El mismo Ledger habla de un deseo incontrolable de proteger a Williams. El director de Candy, Neil Armfield, añade que la relación de Ledger con Williams lo ha provisto de la clase de sustento emocional que no tenía desde el surgimiento de sus años de estrellato. "Pienso que él resultó algo perjudicado por la maquinaria de publicidad americana." dice Armfield. "Perdió ésos años cruciales entre los 19 y 24, cuando descubres como un adulto, quién eres. Esto le pasó con mucha rapidez, y en un ambiente muy foráneo. Así que, pienso que es por eso que él valora profundamente su relación con Michelle y Matilde. Esto lo ha hecho mucho más centrado.".
Los llamados años perdidos de Ledger describen el período entre su separación de la comedia juvenil Ten Things I Hate About You (1999) y su fracaso con la película de suspenso en el Vaticano The Order (2003), tiempo durante el cual el actor fue brutalmente preparado por la maquinaria de fabricación de estrellas de Hollywood para el éxito súper estratosférico. La relación de Ledger con la actuación fue vagamente ambivalente al comienzo. "De niño, nunca miraba películas", explica él más tarde. "Mis padres nunca me llevaron al cine tampoco". Sin embargo, aparentemente comenzó a actuar en la escuela secundaria, después de escoger las lecciones de drama como única alternativa a las clases de cocina. Posteriormente, utilizó al agente de talento de su hermana mayor. "Él me recomendó para cosas pequeñas aquí y allá. ¡Conseguí una pequeña actuación, y pensé, 'Esto es magnífico!' Y eso fue todo."
Ledger pasó, sin esfuerzo, de interpretar a un guerrero celta en la efímera serie de televisión Roar, al romántico protagonista en Ten Things, al héroe de acción en epopeyas de gran presupuesto como A Knight’s Tale y The Patriot. En la última, en particular, en sus muchos momentos de confrontación como el hijo de fuerte temperamento de Mel Gibson, tenemos la implícita sensación de que presenciamos el pase de responsabilidad de un icono australiano a otro. Aquí, con su melena leonina, rasgos de granito y la profunda voz cansina de John Wayne, Ledger, de algún modo, completa la trinidad de megaestrellas de películas antípodas – con Gibson, como padre de todos, y Russell Crowe. Un sueño, quizás, pero para muchos directivos en salas de reuniones de Hollywood esto representaba, en realidad, un riesgo. Y ciertamente, Ledger ha hablado sobre el humillante proceso de ser negociado como una botella de Coke y sobre haber sufrido fuertes ataques de ansiedad en medio de insensibles reuniones de negociación.
La conversación telefónica termina, Ledger se recuesta en el asiento, con una actitud suavemente rejuvenecida en su bajón de ánimo. "Entonces, dónde estábamos?" pregunta, mientras, con entusiasmo, asiente con su cabeza. Regresamos a Candy, a su orientación profesional, y a lo de mandar al diablo el pasado. Le digo que en algún momento se le consideró el nuevo Mel Gibson. Se ríe. "El nuevo Mel Gibson?!. Oh, eso es gracioso". Coincido en que es divertido, pero le insinúo que también es verdad. Y que todo lo que ha hecho desde A Knight’s Tale pareciera ser una reacción contra esa misma posibilidad. Para de reír. "Así fue, más o menos," él está casi de acuerdo. "Imagino que hasta ese momento tan solo estaba, bueno, casi sentía como si no pudiera hacer nada más, y no tenía la confianza para decir, 'Alto! no quiero hacer esto más!'. Y, a parte de eso, estaba profundamente agradecido. ¡Yo era ese niño de Perth, y por eso les dije, 'OK, claro! ¡Seré un caballero!. Un cantante de Rock'n'roll?. Magnifico!'"
Las opciones de carrera fueron desiguales al principio. Hizo hábilmente al preocupado hijo de un carcelero en Monster’s Ball. Pero fue entorpecido por una cómica barba y un chirriante acento irlandés en la insoportablemente digna Ned Kelly (mirando fijamente los increíbles ojos de su coprotagonista Naomi Watts, "Creo que eres la mujer más bella que jamás he visto!"). Algunos de los más serios directores, no estaban seguros de las genuinas capacidades de este guapo chico rubio. "Al comienzo, me habían sugerido a Heath para Candy", dice el director Armfield. "Pero inicialmente me resistí porque me parecía que él traería a este personaje básicamente heroico junto con él." Fue un tiempo difícil para Ledger, cuya única oportunidad en la pantalla surgió con el papel del nervioso Jacob Grimm, el excéntrico y raro intelectual de Brothers Grimm de Terry Gilliam.
Pero entonces llegó Brokeback Mountain. La "película de los vaqueros gays" cambió todo. La actuación de Ledger básicamente como el inalcanzable objeto de amor, Ennis Del Mar – un torbellino de reprimidos murmullos, agresión y confusa vulnerabilidad, todo surgiendo de una boca que parecía estar engrapada por la frustración – fue inmediatamente digna del Oscar. La película se convirtió en un suceso cultural, y fue debidamente adecuada para una gran cantidad de programas de entrevistas en la televisión, editoriales de prensa, sátiras políticas y bloggers en internet. Ledger y su coprotagonista Jake Gyllenhaal fueron sometidos a una lluvia de mal concebidas insinuaciones. "Sé como amar a una mujer", dijo Ledger en aquel momento, pareciendo ligeramente cansado de todo el proceso. Al final, él aparecía obedientemente en muchísimas ceremonias de premiación (Brokeback fue incesantemente agasajada a lo largo del año), se sentaba en su asiento, y cortésmente hacía muecas o gestos, dando a entender que estaba cansado de los chistes que se le hacían sobre que se estaba cogiendo a otro hombre.
"Creo que no estaba tan jodido por las bromas como por el hecho de que estaba allí, en el primer lugar", explica él. "Fue un proceso agotador. De principio a fin". Entonces, ¿fue un alivio cuándo la conmoción por Brokeback disminuyó?. "Coño, sí!". ¿Cuándo terminó oficialmente?. "Cuando el segundo de los Oscar fue entregado. Todos estábamos simplemente tan hartos de eso". ¿Y ahora, cuándo estás en tu segunda juventud y miras atrás en tu carrera, Brokeback Mountain no será una de las destacadas, una de las más queridas?. "Supongo que sí", susurra.
Pero cosas maravillosas han surgido para Ledger desde Brokeback. Tiene una carrera creíble como actor de peso pesado - las profundidades de Candy son simplemente el principio. Y, lo más importante, hay una compañera en Williams y una hija en Matilda. Ellos viven juntos, sin pretensiones, en South Brooklyn, Distrito de Boerum Hill, y en su próxima película, I’m Not There, la pareja trabajará junta. Una reflexión sobre la vida y trabajo de Bob Dylan, la película con las actuaciones de Christian Bale, Cate Blanchett, Adrien Brody y Ben Whishaw como "Dylan-esque". "No tengo idea de qué se trata", dice Ledger riendo entre dientes. "Michelle está rodando mientras nosotros hablamos. Esto es distinto, siete diferentes actores interpretando aspectos de su vida. Yo vi a Cate Blanchett en el set el otro día y fue raro; ella parecía la viva imagen de Dylan!."
Él regresa con Bale, por supuesto, el próximo año en The Dark Knight, la tan esperada segunda película de la nueva y más triste saga de Batman, de Christopher Nolan. Él está interpretando al Guasón; sin embargo, no quiere hacerlo como Jack Nicholson. "Amo esa actuación," dice, refiriéndose a la actuación de Nicholson en el Batman de 1989. "Y adoro a Jack Nicholson. No hay manera, ni siquiera, de que intente llenar sus zapatos". Habla un poco más sobre autocrítica, sobre los quehaceres de criar a una hija, y sobre sus planes, a largo plazo, de ser Director. Él ya está dirigiendo videos de Pop, incluso una promoción de ensueño para el músico Folk Ben Harper. ¿Y entonces, con el respaldo del Oscar, películas de gran éxito, y el reconocimiento de la crítica en el saco, él, ese niño actor holgazán de Perth, alguna vez se despierta por la mañana y sacude su cabeza ante lo surrealista de la situación?.
"Sí, definitivamente!", dice él, antes de lanzarse a algo como una respuesta oficial. "Estoy increíblemente agradecido, y eso, casi me deja sin aliento, y, sí…". Entonces, hace una pausa, inclina su cabeza al mirar su teléfono, y se reordena. "De hecho, se trata menos de despertarse y más sobre pensar cuan afortunado soy de estar en este negocio. Es más sobre cuan afortunado soy de tener, ahora mismo, esta familia". Para, y comienza otra vez. "Esto, para mi, es completamente alucinante. Un billón de veces más que todo. Algo así como, todo lo demás, a quien le importa un coño?."
Candy se exhibirá en The Times London Film festival y se estrenará a nivel nacional el 3 de noviembre.

Traducido por: Tesalia

2 comentarios:

Dalia dijo...

Muchas gracias Tesalia, me encanta esa sinceridad un poco acida de Heath.

Esa es una de las cualidades de él que más me gustán así como de Johnny Depp.

pon dijo...

Precioso trabajo, Tesalia, gracias a Alas por darte espacio.
Cada día me gusta más este chico.
Gracias otra vez a las dos, un beso.